¿Qué es el control Redox para piscinas?

¿Qué es el control Redox?

El control Redox, abreviatura de REDucteur y OXydant también conocido como ORP, Potencial de Reducción de Oxidación en inglés, en francés potencial de oxido-reducción, es una magnitud fisicoquímica que permite medir el poder oxidante o reductor del agua de la piscina. Su función no es medir la cantidad de desinfectante, sino su concentración en la piscina.

¿Cuál es el papel del control Redox?

El control Redox permite medir la capacidad del agua para destruir bacterias, gérmenes, contaminantes... y controlar fácilmente el poder de desinfección del agua.
Se mide en milivoltios en una escala negativa y positiva. Cuanto mayor es el valor, más oxidante es el agua.

En la naturaleza, algunas sustancias tienen electrones negativos, otras tienen electrones positivos. Unas buscan electrones, otras quieren deshacerse de ellos. Es la búsqueda del equilibrio.

Cuando el valor del control Redox es positivo, el agua de la piscina tratada con cloro, bromo o sal, está cargada de agentes oxidantes. Cuando estos agentes encuentran agentes reductores, algas, bacterias, virus, sudor... se crea una reacción Redox. Capturan los electrones y los destruyen, dejando un agua sana.

¿Para qué piscina es el control Redox?

El control Redox es indispensable cuando:

• No es especialmente útil cuando el tratamiento es manual, pero es indispensable si la piscina cuenta con un tratamiento automático con cloro o electrolisis de sal.
• La piscina está cubierta por una cubierta, una persiana, si la piscina está bajo refugio o si la piscina está en interiores.

Cuando la piscina está cubierta y el filtro está funcionando, el cloro producido por los dispositivos no puede ser destruido (cloro) o transformado en sal (electrolisis de sal) por los rayos UV. El cloro se acumula y se concentra, se vuelve agresivo y daña el revestimiento, las tuberías y los equipos... haciendo desagradable el baño, el agua pica y desprende un olor desagradable a cloro...
En estos casos, el control Redox es indispensable, evita la sobre cloración.

¿Cómo medir el control Redox?

No hay tiras reactivas para el control Redox. Sin embargo, se puede adquirir un medidor electrónico portátil, que suele estar asociado a un medidor de pH y/o a un termómetro electrónico, en tiendas de piscinas. Lo ideal es instalar en la sala técnica la caja Redox y su sonda de medición.
Combinada con un regulador de pH, el análisis Redox es confiable y evita la intervención humana.

¿Cuál es el nivel correcto para una desinfección perfecta de la piscina?

No hay reglas ni fórmulas matemáticas, solo tablas que dan una aproximación del valor de Redox en función del desinfectante y el nivel de pH del agua.

Se acuerda y verifica que cuando el pH está entre 7,2 y 7,4; el Redox debe estar entre 740 y 760 mV.
Un Redox demasiado bajo, por debajo de 650mV, indica que el agua no es suficientemente desinfectante. Las bacterias, algas y virus pueden proliferar en el agua. Se eliminarán más lentamente o de manera deficiente.
Para aumentar el Redox, simplemente aumente la cantidad de desinfectante en la piscina, agregue cloro o bromo o aumente el tiempo de filtración para una electrólisis de sal.
Un Redox demasiado alto, por encima de 850 mV, hace que el cloro sea agresivo para la piel, los ojos y también para los accesorios de la piscina, el revestimiento...

El control Redox es una herramienta que permite controlar automáticamente la concentración de desinfectante del agua de la piscina y, por lo tanto, su calidad. "Mide" el nivel y el poder del desinfectante del agua. Regula para usted, la concentración de desinfectante independientemente de las condiciones de uso y las circunstancias meteorológicas. Una vez calibrado el dispositivo, el tratamiento del agua se optimiza.

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